Cuadro de Irina V.Karkaby |
encajamos las miradas
cuando tu voz y mi voz
descifraron el diluvio de la ternura,
cuando en secreto escribimos una carta de amor,
cuando nuestros corazones furtivos
fueron león y fueron furia de cielo.
Nos abrazamos en un diálogo con forma de verbo
y fugaces contemplamos las estrellas
a la luz de la luna.
Elegimos un número al azar
cuando el verde de tus ojos y mi azabache
se fundieron sin retales en el tiempo.
Soberana luz aquel encuentro.
Mujer, vértigo, beso, furia de cielo,
al amanecer.
Otros poemas:
Cazador del tiempo
La vida es lo que tú tocas
Ecos del alma
1 comentario:
Precioso momento y finamente descrito en tus versos.
Un abrazo en la noche.
Publicar un comentario