Cuadro de Leonid Afremov |
Dando nuevos colores a las cosas
Manuel Altolaguirre
Ella, vestida de rojo,
envolvió el sol en una página.
Hizo de su vuelo femenino
un encuentro inevitable con el arco iris,
dando nuevos colores a las cosas.
Decidió ser el viento de piel azabache
que quiso dar la vuelta al mundo,
firmó en los márgenes de la luna
y en las líneas de su cuerpo.
En el fondo, la belleza del sol
acaricia con ternura los pétalos
de una nueva flor.
Brilla un paraíso inesperado.
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3 comentarios:
Es que quizás, en ese vuelo, estaba dando vida a una nueva flor en su alma.
Un abrazo.
Una fiesta de colores. Precioso Mónica♥
Muchas gracias, queridos Rafael y Albany, me alegra muchísimo que os guste este nuevo poema!!
Un beso muy grande.
Mónica
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